México se queda en la orilla en la final de GT Academy

SILVERSTONE, Inglaterra.- El clima dio tregua y la lluvia, típica de esta región, no apareció. Los cinco guerreros de México, Estados Unidos, Turquía, Egipto y Australia que continuaban en la competencia se preparaban para la prueba más desafiante: ocho vueltas al circuito más emblemático de Inglaterra en unos 370 Z de carreras.

Haber llegado hasta ese punto fue complicado ya que a lo largo de una semana se enfrentaron a duras pruebas como carreras en buggies, camiones monstruo, Gymkhana y una en un óvalo a bordo de un Micra, lucha cuyo resultado determinó el orden en el que los países arrancarían en la prueba final. En esta prueba la suerte no estuvo del lado del equipo mexicano ya que un contacto los dejó en el último lugar de partida, siendo Australia los ganadores de la pole position.

Para elegir a quiénes tendrían el honor de representar a su país en el legendario trazado en la prueba final, desde muy temprano se realizaron pruebas de manejo a cada uno de los 30 participantes, con el mentor de cada equipo, para definir quién tenía la mayor capacidad, potencial y posibilidad de ganar. Del equipo mexicano, el seleccionado fue Juan Carlos Carmona.

Foto: GT Academy

En la aguerrida batalla, Carmona, demostró su tenacidad al volante al recuperar poco a poco posiciones y concluir en el segundo puesto, detrás del representante de Turquía, Hüseyin Dağlı, quien supo mantener el ritmo hasta que cayó la bandera a cuadros.

El australiano, Matt Simmons, quedó tercero por un problema mecánico, sin embargo, los jueces llegaron a la conclusión de que su desempeño fue óptimo mientras su auto estaba en buenas condiciones.

Este resultado, junto con sus logros a lo largo de la semana le dieron el triunfo en el Race Camp y lo hicieron acreedor a una beca para que recibir un entrenamiento intensivo de tres meses en Silverstone para convertirse en piloto Nismo y graduarse en las 24 Horas de Dubái, a bordo del GT-R Nismo GT3, que se llevará a cabo en 2016.

“Realmente no lo creo, me siento en la cima del mundo, el programa GT Academy es increíble”, compartió el australiano a punto del llanto.

Una vez más, el programa GT Academy demostró que los videojuegos sí sirven para algo.

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