5 superdeportivos por lo que regresaríamos a los 90

POR: Pablo Monroy el Jue, 16 de Marzo de 2017, 03:10 pm

Un automóvil superdeportivo es un vehículo cuyas prestaciones son completamente superiores a las del resto de los coches, acercándose o superando en algunos casos los niveles de competición. Foto: Lamborghini

Pablo Monroy |

Licenciado en Periodismo por la Escuela de Periodismo Carlos Septién García, fotógrafo automotríz y entusiasta de las cuatro ruedas. / IG: @elpablomonroy

Te presentamos los superdeportivos de calle que brillaron en la década de los noventa por la velocidad que desarrollaban.

Misil alemán

5.- MERCEDES-BENZ CLK GTR

El primer ejemplar de calle se fabricó en 1997 y equipaba un motor V12 de 6.8 litros de cilindrada con 720 caballos de fuerza. Al conjunto le tomaba empujar la aguja del velocímetro de 0 a 100 km/h en 3.8 segundos y registrar una velocidad máxima de 322 km/h.

Foto: Mercedes-Benz.

El último de Enzo

4.- FERRARI F40

Se fabricó desde 1987 hasta 1996 para conmemorar el 40 aniversario de la casa de Maranello, con una producción total de mil 311 unidades. En sus entrañas se escondía un bloque V8 biturbo 3.0 que ofrecía 478 caballos de fuerza al eje trasero, para catapultarlo hasta los 324 km/h.

Foto: Ferrari.

El inglés más americano

3.- JAGUAR XJ 220

EL XJ 220 nació en 1992; su figura aerodinámica ayudaba a la aceleración de 0 a 100 km/h en menos de cuatro segundos y a alcanzar una velocidad máxima de 343 km/h, gracias a los 550 caballos de fuerza que su motor V6 de 3.5 litros biturbo entregaba; se fabricaron un total de 275 unidades.

Foto: Jaguar.

Homenaje a su creador

2.- BUGATTI EB110

El EB110 debutó el 15 de septiembre de 1991, 110 años después del nacimiento de Ettore Bugatti. Su motor V12 de 3.5 litros, dotado con cuatro turbocompresores, generaba 553 hp, administrados por una transmisión manual de seis velocidades, conseguía una velocidad máxima de 348 km/h.

Foto: Bugatti.

Rey de reyes

1.- MCLAREN F1

Durante siete años (1992-1998) la firma de Woking mantuvo la producción del F1. Bajo su carrocería descansaba un poderoso propulsor atmosférico V12 de 6.1 litros de origen BMW, capaz de entregar 627 caballos de fuerza al tren trasero, empujando al F1 hasta los 372 km/h.