Este Audi A7 es para todopoderosos

Estar a la moda no siempre es un afán que lleve a los autos a un buen puerto; sin embargo, ese no es el caso del Audi A7. El vehículo que revolucionó el mundo de los autos de lujo en 2010, con una propuesta más versátil y atrevida que la que le conocíamos a los clásicos sedanes de ese segmento, ha recibido una justa actualización, la cual, además de incorporarle uno que otro gadget, aprovecha la ocasión para dotarlo de una nueva familia de motores que buscan hacerlo más eficiente, sin que en el intento pierda agilidad y empuje.

En cuanto lo tengas enfrente sabrás que tiene algo nuevo. La culpa es de los nuevos faros, que ahora incorporan tecnología para mejorar los consumos de energía al tiempo que se incrementa el haz de luz.

La explicación es que ahora los LED vienen de serie y, opcionalmente, se pueden montar faros tipo Matrix LED, que iluminan el camino sin deslumbrar a otros vehículos en la carretera. Más allá de los faros, la estética de la parrilla también ha sufrido ligeras modificaciones que actualizan el frontal del A7 para ponerlo al día.

Foto: Audi

Sin embargo, los cambios más significativos no los vas a encontrar en el departamento de aretes y maquillaje. Para realmente saber realmente en qué trabajaron los ingenieros de la casa de los cuatro aros durante estos años habrá que ir a las entrañas del auto, empezando por el corazón.

Si bien a escala internacional habrá disponible una nueva y nutrida familia de motores, a nuestro país sólo llegarán algunos.

A nuestra disposición, por una razón que en un principio no entendimos, llegó un 2.0 litros turbocargado.

Si bien sabemos que la cantidad de aluminio y materiales ultraligeros que se utilizan para la fabricación de este vehículo es generosa y reduce significativamente el peso, un motor tan pequeño nos parecía arriesgado para un auto tan generoso de espacio.

Foto: Audi

De los motores que han sido montados en este nuevo Sportback, en México hay dos: el dos litros turbo que impulsaba a nuestro A7, el cual es capaz de desarrollar 252 caballos de fuerza y el ya conocido tres litros supercagado, que alcanza hasta los 333 caballos.

En cuanto nos montamos en el auto, quisimos disipar la duda que nos invadió desde que llegó el auto a la redacción, acerca de qué tan capaz sería este motor de mantener las emociones de manejo que la gama nos había ofrecido la primera vez que nos subimos a un A7.

Nuestro primer contacto con este vehículo fue en la isla italiana de Cerdeña, donde Audi lució en todo su esplendor las capacidades dinámicas de esta plataforma: de ahí que nuestras expectativas fueran tan altas.

Una de las ventajas de este motor es el momento en el que la máquina comienza a empujar; los ingenieros de Audi han ajustado este conocido bloque del grupo VAG, para que la entrega de las 273 libras pie de torque arranque desde muy bajas revoluciones, por lo que prácticamente sólo hay que recargar el pie en el acelerador para encontrar impulso.

Foto: Audi

Dos factores que intervienen determinantemente para que la ecuación funcione son: el reducido peso de la plataforma, a partir del exagerado uso de aluminio, herencia de la tecnología spaceframe del A8, así como la conexión del motor con una transmisión de última generación, S-Tronic de siete cambios con sistema de desacoplamiento en marcha.

El trabajo hecho para cuidar todos estos detalles redunda en la mejora de los consumos de combustible. Para consolidar esta propuesta, los alemanes se han encargado de incorporar el sistema start&stop, así que en medio del pesado tránsito o en cada semáforo el motor se detendrá, con la intención de contener la quema innecesaria de combustible. En el pasado, este sistema desconcertaba mucho, sin embargo ahora que lo volvimos a probar nos pareció prácticamente imperceptible.

Cuando pisamos el acelerador con fuerza, nos percatamos que, contrario a lo que pensábamos, los 252 caballos de fuerza eran suficientes para alcanzar velocidades por encima de los 180 kilómetros por hora, sin embargo no nos fue posible llegar a los 250 que la marca promete como límite, pues nos faltó carretera.

Foto: Audi

Si bien no es un auto para ir a los arrancones del Centro Dinámico Pegaso, el launch control que ahora incorpora ayuda a aprovechar de mejor forma la potencia.

En la carretera, el trabajo de las asistencias electrónicas, nos permite llevar el auto de muy buena forma, sin sentir que lo perdíamos en cada curva, a pesar de sus casi cinco metros de largo y dos de ancho.

Cuando lo leímos en la ficha técnica nos pareció un tanto exagerado, sin embargo, atorados en el semáforo que permite el cruce de peatones frente al Palacio de Bellas Artes, el trabajo hecho para mejorar la insonorización y aminorar la rumorosidad nos sorprendió.

Al interior se ha mejorado el sistema de infoentretenimiento, con una actualización que ahora entre otras cosas permite proyectar los mapas de la navegación en el tablero principal. Aunque, la propuesta de acabados y calidad de los ensambles, con opciones para incorporar maderas o acabados metálicos al gusto del cliente, desde que este auto llegó al mercado ya era extraordinaria.

La motorización supercargada ya la habíamos manejado en la anterior ejecución de este modelo, pero a nuestro gusto ésta no le envidia absolutamente nada, y quienes busquen opciones francamente más deportivas, en esta plataforma seguramente más  que un V6 de 333 caballos de fuerza buscarán un S7 o un RS7.

Foto: Audi

Lo que debes saber de Audi A7

Motor: L4 2.0L turbo

Potencia hp/rpm: 252/5,000

Torque lb.-pie/rpm: 272/1,600

Tracción: Delantera

Velocidad máxima: 250 km/h

0 a 100 km/h: 6.9 segundos

Asientos: Forrados en piel con ajuste eléctrico

Volante: Forrado en piel con controles de audio, manos libres, control de crucero y paletas de cambios

Entretenimiento: AM/ FM, CD, MP3, USB, auxiliar plug-in, pantalla de alta resolución y sistema MMi

Bolsas de aire: Frontales y laterales para conductor y pasajero

Cinturones: Cinco de tres puntos

Frenos: De disco con ABS

Otros sistemas: Control de tracción y estabilidad.

PRECIO: 859 mil 900 pesos es el precio de entrada del A7 en el mercado mexicano; la versión más alta, la S line, tiene un costo de un millón 129 mil 900 pesos.

#AG