Toyota invirtió en un prototipo de vehículo volador, que estará listo para hacer sus primeras pruebas en 2018, con el objetivo de que éste sea el que encienda la llama olímpica en los Juegos Olímpicos de 2020, que se realizarán en Japón.
La firma nipona es uno de los principales patrocinadores de esta justa mundial, que promete ser la más tecnológica y espectacular.