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Mercedes-Benz se glorificó con la versión más potente del GT, el nuevo GT-R

POR: Pablo Monroy el Lun, 27 de Junio de 2016, 06:50 pm

El desarrollo del GT-R se basó en gran medida en la vasta experiencia adquirida en las carreras por parte de AMG, a partir del modelo AMG GT3. Foto: Mercedes Benz +6 VER GALERÍA
Pablo Monroy

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Licenciado en Periodismo por la Escuela de Periodismo Carlos Septién García, fotógrafo automotríz y entusiasta de las cuatro ruedas. / IG: @elpablomonroy

Hace una semana te dábamos cuenta de los primeros adelantos que el sitio español Autobild publicó del nuevo Mercedes Benz GT-R, la bestia del infierno verde; pero no fue hasta el Festival de la Velocidad de Goodwood, Inglaterra, del pasado fin de semana, donde la firma de la estrella levantó el telón y lo presentó formalmente.

 

El llamativo color verde es lo primero que impacta de su imagen y salta a la vista, pero tampoco pasan por alto el cuadro frontal, con su parrilla con dominantes verticales inspirada en el modelo GT3 de carreras, el enorme alerón fijo, rines de 20 pulgadas o el difusor trasero.

 

Pero de verdad, la estética es lo de menos. El coche no solo parece rápido, los ingenieros alemanes hicieron todo lo posible para que lo sea.

 

En primer lugar, fue sometido a una dieta rigurosa para detener la báscula en los mil 554 kilos, 90 menos que su hermano menos rabioso (AMG GT).

 

En la parte inferior de la carrocería se ha instalado un componente en fibra de carbono que, a velocidades de más de 80 km/h, se desplaza hacia abajo 4 centímetros para cambiar el flujo del aire y, pegar como imán, el coche al asfalto con mejorías notables en su aerodinámica.

 

Foto: Mercedes-Benz

 

Por si esto fuera poco, el GT-R de Mercedes porta una tecnología en el eje trasero que permite que las ruedas traseras giren hasta 1.5 grados en función de las condiciones de manejo y velocidad.

 

Rodando a menos de 100 km/h lo hacen en dirección opuesta a las delanteras para mejorar el radio de giro, mientras que a más de 100 lo hacen en el mismo sentido mejorando la estabilidad.

 

Bajo la cubierta del cofre se esconde el mismo bloque V8 4.0 litros biturbo de las versiones inferiores, pero potenciado hasta los 585 caballos de fuerza y 516 lb-pie de torque.

 

La potencia es administrada a través de una transmisión automática de doble embrague de siete cambios que envía toda la fuerza al eje trasero.

 

¿En cuanto a aceleración? Con tremendas prestaciones puede hacer el 0 a 100 km/h en 3.6 segundos y desarrollar una velocidad máxima de 318 km/h.

 

Echa un vistazo a la galería y date el permiso de salivar por un rato.

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