¿Por qué la palabra motor ya no se usará en F1?

Para los nuevos fanáticos de la Fórmula 1 existen dudas de por qué la palabra motor ya no es tan utilizada en la máxima categoría y, en vez de ello, se habla de unidades de potencia o de poder. ¿Un motor de combustión interna sigue propulsando los monoplazas de la máxima categoría del automovilismo? La respuesta es un contundente no.

Desde 2014, los vehículos del Gran Circo son impulsados por una combinación de un motor de combustión interna y un sistema de recuperación de energía que complementa la potencia. El objetivo es crear fuentes de poder más eficientes y amigables con el medio ambiente.

Si un motor de combustión interna ya es complejo, este sistema adoptado por la FIA lo es aún más, pero para que no te agarren con cara de what, aquí te explicaremos los conceptos básicos.

Antes de eso, hablemos un poco de historia de la máxima categoría donde han existido plantas de poder V12, V10 y los últimos V8. Mucha potencia, pero también con un alto consumo de combustible y hoy en día el mundo exige a las compañías ser más amigables con el medio ambiente.

¿Cómo hacerlo en la Fórmula 1? Con motores más pequeños. Lo primero que debes saber es que la unidad de potencia cuenta con un motor V6 1.6L turbocargado con una limitación a las 15,000 revoluciones por minuto.

Pero esto no es lo único que impulsa al monoplaza. A ello se le suma dos sistemas de recuperación de energía. El primero se denomina generador de unidad cinética, conocido como MGU-K por sus siglas en inglés. Éste se encarga de recuperar la energía del frenado.

El segundo es el motor generador de la unidad de calor, MGU-H, que utiliza los gases provenientes de los escapes para convertirlos en energía. Ambos sistemas concentran lo recuperado en el almacenador de energía (ES).

¿Es libre este almacenamiento? No, existen limitantes. El sistema de frenado puede recuperar hasta 4 MJ mientras el de escape 2 MJ. ¿Cuánta potencia se consigue? Bueno, ésta es una de las dudas más grandes en el paddock y es que, los datos que se tienen son meras especulaciones dado que ninguno de los cuatro fabricantes de la categoría (Mercedes-Benz, Ferrari, Renault y Honda) revelan por completo el dato.

Se estima que la combinación del motor de combustión interna y los sistemas de recuperación de energía permiten más de 800 caballos de fuerza, pero que existen hasta 100 hp de diferencia entre los diferentes proveedores.

Pero ésta no es la máxima fuerza que pueden desarrollar. Mercedes-Benz y Ferrari están en una constante carrera por conseguir más potencia, por ello, la posibilidad de alcanzar los mil caballos de fuerza no es descabellada.

LOS TOKENS

Desarrollar un motor de Fórmula 1 no es tan sencillo como pudiera parecer. El objetivo de las nuevas reglamentaciones es reducir el costo y para ello, se limitó el número de piezas, o tokens, que los constructores pueden mover de sus unidades  de poder.

Cada marca tiene un número limitado dependiendo su posición en el campeonato anterior.

Este movimiento se dará hasta 2019, año en que quedarán congelado el desarrollo de todas las unidades.

Así es la nueva Fórmula 1 híbrida. ¿Sencillo, no?