Rosberg rompió el maleficio, nuevamente padre e hijo son campeones del mundo

Por fin, Nico Rosberg salió de la sombra de brillar sólo por el ilustre apellido que Keke Rosberg (su padre) hiciera célebre en 1982 al proclamarse campeón de la máxima categoría, y ha comenzado a brillar con luz propia tras coronarse en la última carrera del año disputada en el circuito de Yas Marina de Abu Dhabi, cruzando la línea de meta en la segunda posición.

Foto: Reuters

Con nueve victorias y 385 puntos en su cuenta personal (apenas cinco más que Lewis Hamilton), Nico ha convertido en letra muerta todas aquellas críticas que lo juzgaron como el hijo de un campeón que se abrió paso en el automovilismo sólo gracias al apellido de su padre, pero la hazaña no fue sencilla y al piloto alemán le tomó once temporadas y 31 años de su vida lograrlo.

Fue el eterno rival de Rosberg, Lewis Hamilton, quien desde las categorías menores robó cuanta victoria pudo al piloto alemán y postergó hasta el día de hoy, que una segunda dinastía de padre e hijo pudiera inscribir su apellido en la historia de la Fórmula 1, pues antes que los Rosberg sólo Graham y Damon Hill lo habían logrado.

Con un monoplaza que cuajó en 2014 y un equipo que parecía tenerlo todo, a Nico Rosberg le tomó cuatro temporadas doblegar a su coequipero, quien a un año de haber permutado de McLaren al equipo de Brackley hiló dos títulos consecutivos y se convirtió en el líder indiscutible de la hegemonía de Mercedes.

13 duplas padre e hijo hay intentado convertirse en campeones, solo los Rosberg y y los Hill lo han logrado

Pero, paciente, Rosberg supo esperar, y gracias a las siete victorias consecutivas que sumó (desde el Gran Premio de México 2015 hasta Rusia 2016), el nivel del tercer campeón alemán de la historia llegó a su climax para aguantar el embate de un Lewis Hamilton que vendió el título tan caro como pudo.

Las 53 victorias del piloto inglés (el segundo más ganador de la historia), diez de ellas logradas en este campeonato, alargaron hasta el último segundo de la temporada la definición de un título que llega a manos de Rosberg por la regularidad de su actuación pues, a diferencia de Hamilton quien abandonó en dos ocasiones, el actual campeón sólo dejó ir una carrera sin sumar puntos.

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Así que al final, de nada sirvieron las cuatro victorias consecutivas del tricampeón inglés ni tampoco que durante la última carrera del año haya frenado tanto como pudo a Nico, dejándolo a merced de los lobos, pues para ser campeón a Rosberg sólo le hacía falta paciencia y temple para terminar el Gran Premio dentro de los primeros tres y de eso el alemán estaba lleno, pues nadie había ganado tantas carreras como él (23) sin haberse proclamado campeón del mundo.

El campeonato termina con un cúmulo de sorpresas, con Sergio Pérez cruzando la meta en la octava posición, la cual le otorgó los últimos cuatro puntos del año con los que el tapatío alcanzó la legendaria cantidad de 101 unidades, que confirman tajantes que ésta ha sido la mejor temporada de su carrera.

Foto: Force India

Checo fue piedra angular de la cuarta posición de su equipo en el campeonato de constructores, que logró doblegar al histórico Williams, quien no pudo mantener en 2016 el nivel que había alcanzado el año pasado, por lo que tuvo que conformarse con la quinta posición de la tabla, a 35 puntos del Force India.

Las últimas curvas de la temporada también le permitieron a Vettel arrebatar el último escalón del podio y dar una última lección a su heredero en Red Bull, la revelación del año, Max Verstappen, quien en España se convirtió en el piloto más joven en ganar una carrera, luego de haber logrado su ascenso desde el Toro Rosso.

Foto: Reuters

Agridulce bandera a cuadros pues, sin noticias que confirmen lo contrario, parece que en el Yas Marina no sólo corrieron por última vez una carrera de Fórmula 1 los veteranos Felipe Massa y Jenson Button sino también el joven piloto regiomontano Esteban Gutiérrez, quien no pudo llevar el monoplaza del equipo Haas más allá de la decimosegunda posición.

Será hasta el próximo año cuando volvamos a ver una carrera de Fórmula 1 y de aquí hasta el 26 de marzo, cuando arranque el mundial en Australia, sólo habrá aperitivos para entretenernos.

EL DATO

Nico Rosberg ahora puede presumir ser un campeón del mundo igual que su padre, Keke, en 1982.

Son la segunda combinación padre-hijo en lograrlo, junto con Graham y Damon Hill, luego de que 13 descendientes lo intentaron.

Lo curioso es que ambos hijos (Nico y Damon) se coronaron como los mejores pilotos del orbe 34 años después de que lo hicieran sus padres.