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Mazda CX-3 es el nuevo rival de cuidado

POR: Cristian Moreno el Jue, 04 de Diciembre de 2014, 12:07 pm

Sin decir agua va, Mazda deja el suspenso para después y no se aguanta las ganas de presumir el vehículo con el que pretende incrementar dramáticamente las ventas de sus camionetas: la CX-3. Foto: Mazda +6 VER GALERÍA
Cristian Moreno

Cristian Moreno | Colaborador

Amo los autos y me apasiona la movilidad. Coordinador del concepto  Atracción en sus distintas plataformas. Editor del periódico Excélsior y conductor en Excélsior Televisión. Consultor, conferencista y colaborador del programa de radio Autos en Imagen. Ciudadano del mundo, hecho en Cuernavaca. 

Ahí, sola, frente a la portería, con la defensa superada y el portero vencido, la nueva Mazda CX-3 ya no puede fallar el tanto. El trabajo más difícil está hecho, así que cuando la nueva camioneta de la firma japonesa arribe a las agencias los vendedores sólo deberán empujarla para marcar la anotación que consolide la ventaja de la marca sobre sus rivales.

 

Sin lugar a dudas, uno de los lanzamientos más esperados del Autoshow de Los Ángeles fue el de la más pequeña de las camionetas de la automotriz de Hiroshima.

 

Las tendencias aseguran que este tipo de vehículos tendrán en el corto plazo un futuro prometedor, toda vez que, las grandes ciudades cada vez más exigen vehículos ágiles, versátiles y compactos: las cualidades más características de la camioneta más compacta de las tres que le conocemos a Mazda.

Fiel a la tradición de la familia, la nueva de la casa calca las líneas de sus hermanas y hermanos mayores; faros, parrilla y el inconfundible trazo, que Mazda explica como el Kodo (alma del movimiento).

 

Pero no todos los argumentos de La Chiquis son estéticos, afortunadamente. La filosofía que se traduce en menor peso, una transmisión más eficiente y motores menos sedientos y a la que la marca ha denominado como Skyactiv también están presentes en cada gramo de la CX-3.

 

La noche previa a que el Salón de Los Ángeles abriera sus puertas, en los estudios Raleigh, muy cerquita de los Paramount, de Hollywood, los japoneses lucieron su nuevo vehículo, junto al ya visto nuevo Miata (MX-5).

 

De entrada la vimos muy parecida a lo que ya le conocíamos a Mazda, y qué bueno. Nos acercamos tanto como pudimos y en más de una ocasión tuvimos que tallarnos los ojos para entender las diferencias con respecto a CX-5, obvio las  proporciones, pero no encontrábamos mucho más.

 

Al otro día la marca nos complicaría aún más las cosas presentando la actualización de la CX-5, apenas a unos cuantos meses de haberla lanzado al mercado y lo mismo haría con el Mazda 6, de tal forma que los detalles que nos parecían nuevos en la CX-3 también estaban presentes en los otros dos modelos.

 

Como todo producto global de Mazda, tendrá diversas motorizaciones, aunque la que le conocimos en Los Ángeles seguramente será la que llegue a México. Una 2.0 litros, acoplada a una transmisión de seis velocidades que, aunque también existe en variante manual, seguramente y por ser camioneta sólo llegará a México automática.

Aunque la plataforma es la misma que la del Mazda 2, al motor lo acabamos de probar impulsando al Mazda 3, el 2.0 SKYACTIV-G, de cuatro cilindros que oscilará entre los 155 y 165 caballos de fuerza con un empuje de 148 libras pie de torque.

 

En cuanto al equipamiento, nada nuevo, la pantalla que ya hemos visto en el pasado, aunque ahora se hace acompañar por un head up display, que facilita la interacción con el conductor.

 

Tal vez lo que más nos sorprendió fue la ejecución de una tracción integral que antes de este salón no le conocíamos a la japonesa.

 

Sus rivales tienen mucho por hacer.

 

#GPM

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