Los pecados más frecuentes al conducir

Aceptémoslo, en nuestra amada jungla de concreto se respeta todo menos el Reglamento de Tránsito, por lo que como un agregado te ofrecemos un apartado de las multas más frecuentes en el Distrito Federal y la manera de estar libre de toda infracción y de todo mal. Toma nota. De acuerdo con las estadísticas de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina las infracciones más frecuentes son las siguientes:

Estacionarse en doble fila.- Es el vicio de todos los padres abnegados que llevan a sus hijos a la escuela, de quien llega al banco en el último momento o de quién simplemente no quiere caminar un par de cuadras. Como alternativas puedes utilizar el transporte escolar, levantarte más temprano, organizar mejor tu día, utilizar el transporte público o meter tu auto a un estacionamiento. De acuerdo con el Reglamento de Tránsito Metropolitano los conductores que sean sorprendidos en doble o triple fila se harán acreedores a una multa de cinco salarios mínimos, es decir 295 pesos y el coche irá directo y sin escalas al corralón.

No usar el cinturón de seguridad.- Tendría que ser castigado con cárcel el hecho de no usarlo, pero por esta falta al Reglamento de tránsito Metropolitano los conductores tendrán que pagar 295 pesos. Recuerda que en caso de un accidente este implemento podría ser la diferencia entre salir bien librado o pasar a mejor vida.

Estacionarse en lugares prohibidos.- En una ciudad con tan pocos espacios de encontrar un lugar para dejar el auto se convierte en una labor titánica, por lo que muchos caen en la tentación de ocupar espacios que lo prohíben. Siempre será mejor pagar unos pesos en un estacionamiento público, que tener que ir al corralón.

No contar con la licencia de conducir.-  Parece un chiste, pero no lo es y aunque está al final de las sanciones más recurrentes en el DF, no deja de ser ridícula. Por no tener licencia para circular tendrás que pagar 590 de infracción y el coche será llevado al depósito. El precio de la licencia por tres años es de 626 pesos. En el caso del permiso para menores de 18 años el costo es de 321 pesos.

Hablar por celular mientras se conduce.- Recuerda que es indispensable utilizar sistemas de manos libres de no hacerlo así tendrás que pagar una sanción de 295 pesos.

Circular por carriles de contraflujo.- Un deporte extremo que gusta mucho en la capital del país; sin embargo, esta práctica es una irreverencia porque te arriesgas a encontrarte un autobús de frente. Los conductores que sean sorprendidos haciéndolo se harán acreedores a una sanción de mil 180 pesos y, desde luego, tu coche irá al corralón.

No obedecer los señalamientos.- La anarquía que se vive en nuestras calles explica el eterno caos vial en el que vivimos, pero por no respetar los señalamientos tendrás que pagar 295 pesos, aunque claro está, depende dónde lo hagas: por ejemplo, dar una vuelta prohibida por la ruta del Metrobús te costará más de mil pesos y tu auto será llevado al corralón.

Llevar a menores de 12 años en la parte delantera.- Tiene que ser una de las faltas de criterio y conciencia más grandes que se puedan cometer, porque pones en riesgo la vida de un menor en un percance ya que éste es uno de los lugares más inseguros para un niño, además si el coche tiene bolsa de aire para pasajero ésta podría matarlo o lesionarlo gravemente. Siempre coloca a los menores en la fila trasera, ajústalo con una silla especial para niño o un cojinete para que al usar el cinturón de seguridad estén ubicados a la altura indicada.

Exceso de velocidad.- Es absurdo estar jugando al cuarto de milla en calles y avenidas que no están hechas para ello. Debes recordar que el límite de velocidad establecido para vas primarias –avenidas, ejes viales, calzadas– es de 70 kilómetros por hora, salvo en las vías rápidas como Periférico, Viaducto y Circuito Interior – donde existen señalamientos que autorizan circular a un máximo de 80 kilómetros por hora. En vías secundarias la velocidad máxima es de 30 kilómetros por hora y en zonas escolares, peatonales, de hospitales, de asilos, de albergues y casas hogar, la máxima es de 20 kilómetros por hora. Las personas que padecen el mal del pie de plomo tendrán que pagar una sanción equivalente a 295 pesos, pero si son atrapados participando en carreras callejeras (arrancones) serán sometidos a un arresto inconmutable de 20 a 36 horas y el vehículo será llevado al corralón.

Estacionarse en lugares prohibidos.- En una ciudad con tan pocos espacios de encontrar un lugar para dejar el auto se convierte en una labor titánica, por lo que muchos caen en la tentación de ocupar espacios que lo prohíben. Siempre será mejor pagar unos pesos en un estacionamiento público, que tener que ir al corralón.

Obstruir pasos peatonales.- Por convertirte en un obstáculo vial para los peatones serás sancionado con 295 pesos. La mejor manera de terminar mordiendo raya es anticipar la luz preventiva, recuerda que la luz amarilla no significa que aceleres intentando ganarle a la roja, sino todo lo contrario.