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Jeep ha metido un Wrangler en algún lado de la Cherokee

POR: Christian Pérez Vega el Dom, 28 de Enero de 2018, 11:03 pm

El nuevo Jeep Cherokee nos ha dejado con la boca abierta, sus cambios van más allá de lo estético
Christian Pérez Vega

Christian Pérez Vega | Colaborador

Llegué aquí cuando los astros automotrices se alinearon a mi favor. Me especializo cada día en industria automotriz desde 2010.

Sólo uno días después de su presentación en el Autoshow de Detroit, viajamos a Los Ángeles California para el primer acercamiento internacional con la nueva actualización del Jeep Cherokee, este SUV compacto que no sólo se ha quedado con la renovación estética que mostró en la primera muestra automotriz del año, donde lució una imagen mucho más ruda que deja de lado los rasgos de tipo… digamos asiáticos, que identificaban al modelo anterior por medio de los faros delgados y luces bajas y una parrilla afilada. Si no que ahora, con los ajustes en su paquete motriz, sorprende favorablemente para hacerlo el SUV mediano más capaz del mercado.

 

Sin duda lo que más sorprende es la integración del motor 2.0 litros turbo que otorga un desempeño más deportivo a este modelo, pero desafortunadamente por el momento no estará disponible en el mercado mexicano dado a los costos que representa este nuevo bloque, harían demasiado caro al Cherokee y poco rentable en nuestro país, pues no mucha gente lo pagaría.

 

FOTO: Jepp

 

Si bien el modelo estará disponible para el mercado estadunidense en cinco configuraciones de equipamiento y con los motores 2.0 litros turbo, 2.4 litros Tigershark y el 3.2 litros Pentastar, para México sólo estará disponible el bloque V6 en las versiones Overland 4X2 y Trailhawk 4X4, las cuales llegarán durante el segundo trimestre de este año.

 

Para nuestra prueba de manejo, tuvimos la oportunidad de manejar la versión urbana (Overland) por una ruta que incluía un tramo en ciudad, donde pudimos comprobar y poner atención a los detalles de calidad en los materiales con los que ahora fue construido este modelo, donde es notorio el esfuerzo por tener un vehículo que inspire la sensación de estar en un auto de nivel Premium, tanto en diseño, como en el equipamiento y calidad de materiales.

 

FOTO: Jeep

 

Posteriormente circulamos entre un retorcido camino, cuyas curvas pusieron a prueba la fortaleza estomacal de los que íbamos abordo. Este camino, debido a su alto nivel de complejidad, requería de todos nuestros sentidos y reflejos al 100, y gracias a las asistencias al manejo que le fueron integradas al Cherokee 2019, junto con el bien trabajado sistema de suspensiones jamás nos sentimos en peligro pues el SUV nunca roló o dio síntomas de perder la adherencia al piso, lo que transmitió en todo momento confianza.

 

Debemos decir que el ajuste hecho al V6 y a la caja automática de nueve velocidades, ha mejorado demasiado el desempeño del Cherokee, el buen empuje y respuesta de la transmisión hace de este SUV apto para la ciudad y carretera.

 

FOTO: Jeep

 

Después de haber superado el largo trayecto de curvas, llegamos a un rancho donde la Traailhawk nos esperaba, este modelo simplemente nos dejó con la boca abierta pues su look más agresivo, gracias a la parrilla más achatada que el modelo anterior, más el diseño de los faros y las luces de niebla más arriba que ncrementan la luminosidad hasta 50%, le aportan un estilo más elegante y a la vez agresivo.

 

Cuando llegamos al lugar, simplemente esperábamos que nos trasladaran a otro sitió pues el entorno estaba rodeado de altas montañas y no había señales de haber algún camino donde pudiera ser la prueba OffRoad, o por lo menos no para un SUV urbano. Tal fue nuestra sorpresa cuando nos dirigieron al circuito de prueba donde el primer obstáculo era una cama de afiladas y altas piedras que parecían ser un obstáculo diseñado para ser conquistado solo por unidadades como el Wrangler o un G500. Los miembros del staf de Jeep nos dieron las debidas indicaciones de manejo y de ajuste de los sistemas del SUV, las cuales no le piden nada a un todoterreno nato.

 

FOTO: Jeep

 

Poco a poco pasamos las rocas, algunas eran tal altas que golpeaban fuertemente en la parte baja de nuestro Jeep, pero el auto está hecho para soportar eso y más, así lo demostró pues no fue suficiente para detenerlo y seguimos avanzando hasta superar el obstáculo, miramos al frente y ya no había camino, bueno no uno lógico, seguimos por unos metros hasta llegar a una bajada muy, pero muy pronunciada que dejó al Jeep en tres ruedas,. Vuelta a la izquierda y nuestro cerebro ponía todos los sentidos en alerta, pues parecía que por la inclinación que alcanzamos en cualquier momento volcaríamos.

 

Un obstáculo más, ahora vamos por un estrecho camino donde ni siquiera hubieramos podido abrir las puertas si lo intentábamos, al frente sólo había una pared de arena y piedras, avanzamos y a la izquierda una inclinada pendiente, llena de rocas resbalosas nos esperaba, otra vez la lógica nos decía que no era posible, no en una SUV, poco a poco subimos y después de unos metros en la cima se nota un Wrangler como si estuviera supervisando las capacidades de su pupilo, ahí caímos en cuenta que sí, en algún lado dentro de esta SUV había un poderoso Wrangler escondido.

 

FOTO: Jeep

 

Después los obstáculos ya no parecían complicados, la confianza estaba dada, y sólo nos volvimos a sorprender hasta que en algún momento, entre tantas subidas volteamos y vimos la carpa donde llegamos como si fuera una miniatura, ¿Tanto subimos, por ahí? Imposible, un SUV no debería poder hacer esto.

 

Lo cierto es que Jeep ha creado un SUV compacto sin oponente que pueda siquiera acercarse, tal vez Montero, pero por su tamaño, no podría hacer lo que este Cherokee, pues se acerca mucho a lo que un Wrangler puede hacer.

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