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QX30, la apuesta de Infiniti para atraer clientes jóvenes

Con genes alemanes, puesta a punto japonesa y los gustos estadunidenses en mente llegó la QX30, una de las apuestas más fuertes de Infiniti en el año, que busca atraer clientes más jóvenes, con diseño, manejo y equipamiento

POR: Martha Elena Blanco el Mié, 03 de Agosto de 2016, 11:12 pm

Seattle fue el escenario perfecto para que Infiniti nos presentara el nuevo crossover con el que busca conquistar Norteamérica. Foto: Infiniti
Martha Elena Blanco

Martha Elena Blanco | Colaborador

LN. Amante de la velocidad desde la andadera, acelera tus pulsaciones junto a mí en la carretera infinita de la vida, eres mi copiloto yo soy tu driver lleguemos hasta donde no exista tacómetro que marque los límites. Incendiemos el asfalto.  

SEATTLE, Washington.- La tierra de oportunidades. Aquí Bill Gates fundó Microsoft, William E. Boeing estableció su compañía de aviones, Kurt Cobain y Krist Novoselic iniciaron Nirvana, uno de los grupos más emblemáticos del grunge, e Infiniti lo eligió para que la QX30 diera sus primeros pasos en América.

 

Derivada del Q30, la nueva QX30 presume genes alemanes, pues fue desarrollada en conjunto con Daimler y cuenta con varios elementos mecánicos derivados de la Mercedes-Benz GLA, que son mucho más evidentes en el habitáculo.

 

La primera premisa de Infiniti es asegurar que no es un reetiquetado de un producto alemán, si no el fruto de una colaboración, que tiene el sabor que la filial de lujo de Nissan sabe ponerle a sus vehículos.

 

Foto: Infiniti

 

La más pequeña de familia llega a un segmento en pleno desarrollo dominado por las marcas alemanas (BMW X1, Audi Q3 y Mercedes-Benz GLA) con una propuesta de diseño distinta a sus competidores.

 

El diseño fluido de la toda la carrocería sigue los genes que conocimos hace dos años con Q50, un frente muy expresivo, con faros que crean la ilusión de ser unos ojos, para las dos versiones que llegarán a México serán full LED, las líneas del lateral mantienen la sensación de movimiento hasta la cajuela, donde de nuevo encontramos señas de identidad Infiniti, las calaveras de LED y el poste C en forma de Z, que inclina más el medallón y le da ese look tan deportivo a todos los autos de la compañía.

 

Fotos: Infiniti

 

Quizá utilizar la fascia trasera con protector y más alta de la versión All Wheel Drive le hubieran dado una vista más de mini camioneta, por que parece más un hatchback elevado. Eso sí, hay que reconocer el aprovechamiento del espacio, que brinda cinco plazas de muy buen tamaño y una cajuela con la que poco se quejarán por no tener donde meter el equipaje o el súper.

 

Por dentro, la disposición de los elementos es muy parecida a la de la GLA, por no decir igual, pues hasta el volante es el mismo que utiliza Mercedes, pero se aprecian diferencias en los relojes del tablero, los controles del aire acondicionado, los del sistema de sonido, la pantalla multimedia y el controlador central del sistema de infoentretenimiento.

 

Foto: Infiniti

 

Quizá una de las cosas en las que más se agradece su herencia deportiva es en los asientos, de una sola pieza, deportivos y muy confortables.

 

El tour de la felicidad

 

Aunque nos hubiera encantado ir a Aberdeen, lugar donde nació Nirvana, Infiniti tenía pensada otra ruta que nos llevo a los poblados de Tacoma y Bellevue, donde los freeways, las zonas urbanas y las carreteras de montaña nos brindarían una mejor referencia de la QX30.

 

Las largas carreteras del condado de Washington nos permitieron probar la buena aceleración del motor 2.0 litros turbocargado (de 208 caballos de fuerza), que con el modo Sport activado resalta los genes deportivos del tren motriz alemán, y nos recuerda que cualquier Infiniti siempre busca ser emocionante cuando se aprieta el acelerador.

 

Foto: Infiniti

 

Este bloque se une a una transmisión automática de doble embrague y siete velocidades, también herencia de Daimler, en la que los ingenieros de la firma trabajaron para tener una configuración de cambios muy suaves y prácticamente imperceptibles cuando manejamos en modo Eco o Normal, y mucho más agresivos en el programa Sport.

 

Sin importar las horas que pases dentro del auto, ya sea porque el viaje es largo o porque lo hiciste largo al perder una salida en la carretera (como nos pasó), los asientos deportivos tienen una sujeción y firmeza adecuados para que nunca sintiéramos que habíamos pasado demasiado tiempo sentados.

 

Foto: Infiniti

 

Característica que se combina con una disposición ergonómica en los elementos de la consola central, de la cual se rescata la perilla selectora de medios que, si bien es un rasgo muy alemán, hace mucho más accesible la operación de la pantalla del sistema de infoentretenimiento cuando estás en el asiento del conductor, por cierto, hubiéramos preferido que dejaran la que monta Mercedes, luce más elegante y moderna que la utilizada por Infiniti.

 

Quizá el mayor diferenciador venga en la puesta a punto de la suspensión, un poco más firme que en su prima alemana, pero como siempre confortable y lista para sortear las sorpresas del asfalto.

 

Foto: Infiniti

 

Seguridad a tope

 

La seguridad es un tema que la firma japonesa no se toma a la ligera y en QX30 incorpora de serie: siete bolsas de aire, frenos ABS, freno de emergencia que detiene el vehículo totalmente si detecta la posibilidad de un impacto frontal o trasero cuando circulamos en reversa, alerta de abandono de carril, que emite una vibración en el volante cuando empiezas a tocar los bordes del camino, mismo que nos llevó al Chateau Schafer, una casa que se inspiró en un castillos alemán y que fue construido por la primera mujer arquitecta en Washington.

 

Foto: Chateau Schafer

 

La cereza del pastel llega con la cámara de 360º, sello de la firma y que nos permite tener una visión completa de lo que tenemos al rededor del auto, aumentando la seguridad al estacionarnos y también para evitar golpear a alguien o algo.

 

De lo que habrá que tener cuidado, sobre todo en los cuidados caminos mexicanos, es de no caer en un bache o pisar algo que pinche los neumáticos run flat, montados en rines de 19 pulgadas, ya que no cuenta con llanta de refacción, solo viene un kit de sellado, que nos llevará a rodar a muy baja velocidad o terminar en la plataforma de una grúa.

 

A México llegarán dos versiones de QX30 (de las tres disponibles en Estados Unidos): la Sport que cuenta con un acabado especial y una combinación de negro y gris con detalles en morado, incluso en los rines de doble radio y aluminio maquinado; y la Sport Plus, que aumenta su oferta a ocho colores y un diseño distinto de interiores y rines.

 

Foto: Martha Elena Blanco

 

Este crossover es fabricado en Sunderland, Reino Unido, y llega como una propuesta interesante con respecto a sus competidores a través de la cual busca llegar a un público más joven que se sienta atraído por el diseño e imagen deportivo de la firma, pero que privilegie la comodidad y el confort en cada uno de sus viajes.

 

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