Infiniti Q70 es sólo para quienes tienen estilo
POR: Cristian Moreno el Vie, 22 de Mayo de 2015, 02:03 pm
Cristian Moreno | Colaborador
Amo los autos y me apasiona la movilidad. Coordinador del concepto Atracción en sus distintas plataformas. Editor del periódico Excélsior y conductor en Excélsior Televisión. Consultor, conferencista y colaborador del programa de radio Autos en Imagen. Ciudadano del mundo, hecho en Cuernavaca.
DORADO, Puerto Rico.- Más de quince horas tuvieron que pasar para que pudiéramos llegar a nuestra cita, una con la nueva propuesta de Infiniti, el Q70. Estuvo de locos, pero al final la travesía bien valió la pena.
Las complicaciones para sortear el control de pasaportes en Miami y recoger el equipaje nos hicieron sentir que más que la Unión Americana estábamos atravesando medio globo terráqueo.
420 HP ofrece el V8 de la versión Perfection.
No llegamos a Japón ni mucho menos, el vuelo de American Airlines apenas nos había llevado a Puerto Rico, En cuanto aterrizamos en la isla nos dirigimos hacia la costa norte, al municipio de Dorado.
El fastuoso hotel nos dio una idea de que lo que estábamos a punto de ver sería algo especial, grande y lujoso, tal como la sede en la que se presentó.
Foto: Infiniti
Los planes de Infiniti en México son serios y ambiciosos, es por ello que el paso que están dando para consolidar el portafolio de productos suena lógico y necesario, toda vez que el Q70 es el sedán más grande y poderoso de Infiniti en el mundo y aunque con su arribo a nuestro territorio sus ventas no nutrirán el volumen, sí dejarán claro que están llegando a una nueva categoría.
15.9 kilómetros por litro es el mejor consumo de combustible que ofrece este sedán.
Para que se den una idea del segmento en el que Infiniti piensa llegar a faltarle al respeto a los alemanes, basta con ver a los exponentes que dominan las ventas en esa categoría: BMW Serie 5, Audi A6 y Mercedes-Benz Clase E, pues una vez familiarizados con estos autos es más fácil imaginarlos los argumentos con los que debe vincularse a la letra Q y al número 70.
Foto: Infiniti
Sin escatimar
Por eso Infiniti no podía llegar con las manos vacías. Así que sobre un emotivo diseño de grandes faros y torneadas líneas montó toda la tecnología que tenía a su alcance.
Un buen ejemplo, que clarifica los alcances de la marca de lujo japonesa, es el sistema de predicción y frenado inteligente de colisión frontal, que le permite al vehículo monitorear lo que está pasando, incluso, hasta dos vehículos adelante del nuestro.
Al salir del hotel, las primeras carreteras que tomamos nos permitieron comprobar la calidad de la marcha. Sin embargo, apenas unos kilómetros por delante, un aburrido camino con tránsito pesado y hasta uno que otro bache y tope nos obligó a fijarnos en otras cosas del auto.
Foto: Infiniti
La calidad de los materiales, el sofisticado equipamiento y el confort de los asientos están muy enfocados en lo que un propietario de un auto de lujo espera de su vehículo.
El sistema de infoentretenimiento nos mantuvo siempre bien orientados, pues no teníamos la menor idea de cómo llegar a nuestro destino.
Junto al director de Infiniti México, Philipp Heldt, viajamos a Puerto Rico para conocer las cualidades del Q70.
De pronto nos encontramos con trayectos más parecidos a los de nuestro país, con estrechos caminos que nos obligaron a mantener los ojos bien abiertos para mantenernos dentro de la carretera.
Una enorme piedra en el camino lastimó el Q70 que iba por delante nuestro, lo sorprendente es que el conductor ni siquiera se enteró de lo que había ocurrido, esto nos permitió comprobar que la calidad de la dirección y la comodidad de la suspensión fueron hechas a prueba de todo.
Poco antes de nuestra sesión fotográfica hubo que hacer maniobras con muy poco margen de error, para acomodarnos dentro del campo de golf, pero gracias a las cámaras de apoyo nos fue muy fácil ejecutar los movimientos.
Foto: Infiniti
La cita para ir a cenar era a las seis, así que tomamos apurados el último tramo de la ruta. Poco tiempo y muchos kilómetros por recorrer.
De no ser por la agilidad del auto y de la transmisión automática de siete velocidades, acoplada al motor V6 3.7 litros, seguramente no habríamos podido llegar con tres minutos de sobra a nuestra cita. Ya en la autopista, experimentamos la delicia de exprimir los 330 caballos de fuerza y 270 libras pie de torque, y si éste es un auto ya poderoso, imaginamos lo que podríamos hacer a bordo de la versión impulsada por el V8.
Las asistencias electrónicas están a la altura del equipamiento de los sedanes más sofisticados del mundo, ya sólo habría que ver si tantas cualidades y argumentos alcanzan para atentar en contra de lo establecido por las marcas dominantes.
Infografía: Jaime Castillo
#AG
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