Ford Lobo 2015 tiene músculos que seducen

Cauto silencioso, el Lobo salió una noche atraído por el olor de un rebaño... así describía en una de sus fábulas Leonardo da Vinci al sigilo con el que este animal acechaba.

Cuando Ford puso en nuestras manos a una de sus creaciones consentidas, inevitablemente ésta fue la idea que vino a nuestra mente.

A muchos podría no sorprenderles que hoy día un auto se comporte de esta manera, sin embargo el que sea una pick up, definitivamente cambia las cosas.

2 Motorizaciones tiene la nueva Ford F-150: la primera es un V6 de 365 caballos de fuerza, mientras el segundo es un V8 de 385 hp. 

La noche había cubierto la ciudad y con la cuenta regresiva en nuestra contra, todavía algo absortos por la primera impresión que nos dio, nos pusimos por primera vez al mando de la increíble montura.

Y es que apenas se abrieron las puertas del elevador que baja los autos en las instalaciones del periódico Excélsior, los enormes faros de LED iluminaron toda la escena.

La enorme parrilla y el nuevo diseño aerodinámico de este mastodonte, que a simple vista prometía el derroche de tecnología, cibernético y robotizado, nos hacía sentir que en cualquier momento la camioneta se levantaría en dos pies, cual Transformer. No pudimos ocultar la alegría que esta idea nos provocó y con una enorme sonrisa abrochamos el cinturón de seguridad y hundimos el pie en el acelerador.

No esperábamos el rugido del motor de una camioneta nos estremeciera así, sin embargo la reacción no nos molestó, por el contrario nos emocionó.

Sin embargo, y en honor a la verdad, por increíble que parezca, lo menos sorprendente de esta camioneta, que parece más una nave espacial, es su esculpido diseño. Cualquiera con un poco de experiencia en pick ups pondrá más atención a su comportamiento y desempeño y, precisamente, fue ahí donde los ingenieros de Ford echaron toda la carne al asador.

Tras poco más de seis años de desarrollo y con un importante juicio en puerta, cuyo veredicto definirá qué tan eficientes pueden llegar a ser los autos que porten el óvalo azul, la marca estadunidense rompió el molde y echó por la borda los paradigmas.

Apostó por el uso de uno de los materiales que en el pasado estaban reservados para autos de lujo y de alto desempeño, el aluminio. Pues para Ford su F-150 era tan importante como un A8 para Audi, así que no escatimó en el uso de este material, a pesar de los altos volúmenes de ventas de esta camioneta y del costo de este material.

Además, se tiene acceso a una cámara de 360 grados.

Más allá de lo rimbombante que puede sonar este argumento, el resultado fue impresionante: haber perdido más de 300 kilogramos de peso y obtener una solidez estructural nunca antes vista en una pick up, lo cual influyó directamente en el comportamiento y torsión de esta camioneta.

Sólo el tiempo dará el juicio final, pero la pretensión de esta adorable creatura es alta: llegar a ser la mejor del mundo y colocarse en pináculo de los 66 años de historia que acumula la serie F de Ford, con 12 generaciones de experiencia, en los que ha colocado la impresionante cifra de más de 30 millones vendidas, consolidándose como la más comercializada de la historia y el vehículo más popular de la Unión Americana.

Nosotros nos sentíamos raros a bordo de ésta, la decimotercera generación, más ligeros y ágiles, como si en lugar de rodar flotáramos, comprobando que ganarle a la báscula siempre trae beneficios.

Esta camioneta cuenta con una pantalla de 8 pulgadas en el tablero. 

Mientras conducíamos, las ideas rebotaban en nuestra cabeza, haciendo toda clase de relaciones, pues las sensaciones no se parecían a las que antes habíamos tenido a bordo de una Lobo. Lo primero que agradecimos fue la mejor respuesta en la aceleración, y si bien no estábamos a bordo de un deportivo, la experiencia fue por de más emocionante.

El menor peso nos permitiría llevar mayor carga (casi una tonelada) y al mismo tiempo reducir dramáticamente los consumos de combustible.

Los responsables de hacerte sentir todo poderoso, a bordo de este cohete, serán un V6 Ecoboost 3.5 litros capaz de desarrollar 365 caballos de fuerza y la impresionante patada de 420 libras pie de torque, únicas en el segmento; así como un V8 de 5.0 litros, de 385 caballos y 387 libras-pie, acoplados a una transmisión automática de seis velocidades.

Sin ningún obstáculo atravesamos prácticamente toda la ciudad y pasadas las once y media de la noche llegamos a nuestro destino, apenas a tiempo para recargar las pilas, pues muy temprano al otro día había que ir a surcar los caminos que nos llevarían al Nevado de Toluca, travesía en la que pudimos comprobar la tracción 4x4, que cumplió cabalmente su objetivo. Nada que no le hayamos visto antes a una Lobo.

Y si bien no tan trascendental para las funciones primarias de una pick up, aunque no menos importante en estos tiempos en que estas camionetas son cada vez más personales, el equipamiento y confort al interior también elevan la vara.

300 Kg perdió esta nueva generación de la camioneta gracias a los materiales utilizados para su nueva fabricación. 

En principio de cuentas nos agradó el generoso espacio interior, aquí todo cabe. El habitáculo se siente ergonómico y confortable, se percibe lleno de gadgets y tecnología, propios de un vehículo de última generación.

Más allá de la piel, los asientos con función de masaje y calefacción, la pantalla táctil desde la que se manipula el sistema de infoentretenimiento y en la que se puede ver la imagen de la cámara de reversa, los controles eléctricos, y el sistema Sync y My Ford Touch que ya hemos visto en otros vehículos de la marca para facilitarnos las vida a bordo, llamó poderosamente nuestra atención la posibilidad de abrir el portón de esta pick up de manera remota.

La lista de detalles es mucho más larga de lo que pudiéramos imaginar, y el objetivo de reinventar por completo al best seller del mercado más influyente del mundo se ha logrado: la nueva Lobo será por muchos años más el referente de un segmento que ha evolucionado y está más vivo que nunca.

Y si algún pero tuviéramos que ponerle es precisamente su tamaño, pues no encaja en cualquier ciudad ni embotellamiento, a pesar de lo cómodo que puede llegar a ser pasar las horas a bordo de un auto así.

Detalles que debes saber sobre Ford Lobo:

Motor: V6 3.5 litros turbocargado

Potencia hp/rpm: 365/5,000

Tracción: 420/ 2,500

Transmisión: Automática de seis velocidades

Dirección: Eléctrica asistida

Asientos: De piel para cinco pasajeros

Volante: De piel con controles para el infoentretenimiento

Entretenimiento: Radio AM/FM, CD, Bluetooth, USB, auxiliar plug-in, trajeta SD, navegación satelital, pantalla táctil de siete pulgadas, 10 bocinas Sony y sistema SYNC.

Bolsas de aire: Frontales y laterales para conductor y pasajero, de cortina para las dos filas

Cinturones: De tres puntos

Frenos: De disco en las 4 ruedas con ABS

Otros sistemas: Control de curvas, de velocidad adaptable y advertencia de colisión frontal, de punto ciego

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