Pantera: el extraño auto con corazón Ford

Cada auto tiene una historia. Por lo general habla de fracaso o éxito acorde a sus ventas y rentabilidad. Sin embargo, hubo un tiempo en que algunos autos eran concebidos como verdaderas artesanías. Una de las joyas casi desconocidas en la historia automotriz fue el auto que puedes ver en las imágenes, conocido como Pantera.

Fue concebido por un hombre, Alejandro De Tomaso, quien nació en Buenos Aires y a los 31 años comenzó a fabricar automóviles bajo una marca que montaba su apellido. Entre sus creaciones creó vehículos como el Vallelunga, el Mangosta e incluso un Fórmula 1.

El Pantera es uno de las historias automotrices más curiosas de las que se tiene registro. En aquella época Ford buscó comprar a Ferrari y recibió un desaire que no desanimó a los de la marca, pues por aquellas épocas habían presentado su Mustang y el imponente Ford GT40. Pero la idea de participar de un vehículo con aires totalmente deportivos quedaba entre sus planes.

Entonces conocieron a De Tomaso Automobili. La empresa de un visionario artesano automotriz y compraron acciones convencidos por el legendario Lee Iaccoca (la mente maestra detrás del Mustang), de comprar acciones de la modesta compañía.

Sabían que una gran idea estaba siendo desarrollada en conjunto por dos trabajadores de De Tomaso: Thomas Tjaarda (diseño) y Gian Paolo Dallara (mecánica).

Cuando Ford entró en la ecuación surgió una belleza sobre ruedas: el Ford Pantera.

Durante años este coche se cocinó a fuego lento. Los planes comenzaron en 1960 y fue hasta 1971 cuando fue lanzado al mercado.

La debacle

Pese a que era una belleza y montaba un motor V8 con 310 hp, la historia y el destino jugaron el contra del Pantera. De salida llegaron más de 4 mil vehículos del modelo a Estados Unidos esperando conquistar de forma contundente el mercado.

Tristemente ocurrió una gran crisis petrolera en Estados Unidos que provocó que para 1973 las ventas de los traga-gasolina se desplomaran. Pantera utilizaba un motor de 5.8 litros, por lo que pereció en su intención de sobresalir.

Tras ver su sueño concretado, De Tomaso sufrió el retiro de apoyo de Ford con el paso de los años. El Pantera apenas vendió 7 mil unidades hasta 1990 y jamás fue comprendido por el público estadunidense que prefirió quedarse con el Corvette, Mustang y Camaro.

Sin embargo, en Italia el Pantera es un coche de culto. Una de esas extrañas historias que juntan lo mejor de dos mundos. Un auto que sobrevivió un instante para cumplir la historia de un solo hombre, que hizo autos de la forma y pasión que muchas marcas han perdido con el paso de los años.

Imágenes: Autopasión, CarHistory, Jalopnik,

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