El secreto de las dos llaves del Bugatti Chirón

El Bugatti Chirón es uno de los autos más impresionantes en la historia de la industria automotriz. Un ejemplo de ingeniería y tecnología al servicio de la potencia y velocidad. Posiblemente en unos años se le reconozca como uno de los autos que marcaron historia, y no es para menos.

Esta es la segunda llave. Foto: Bugatti

El esperado sustituto del Veyrón, rompió las carreteras en cuanto se supieron sus primeras características. Ahora que ya lo hemos visto en todo su esplendor, nos queda claro que aún esconde algunos detalles que muchos todavía ignoran.

Una de las curiosidades más peculiares de este vehículo reside en sus llaves. Cuando compras un Chirón –si alguien lo ha hecho que nos cuente a detalle cómo es esto-, en la concesionaria no te dan una, sino dos llaves, y no estamos hablando de un repuesto. Ambas son funcionales.

Un detalle curioso que vale la pena abordar.

¿Por qué dos llaves?

Como muchos lo sabrán, algunos autos –sobre todos los más “recientes”, cuentan con modos de conducción que cambian un poco las prestaciones del coche para optimizar algunas cualidades. Mientras los mortales nos conformamos con modos Comfort, Normal y Sport, el Chirón cuenta con cinco, cada uno más espectacular que el otro. El que se encuentra en el tope, es el que oculta la razón de la segunda llave.

Esta preciosidad tiene dos llaves. Foto: R&T

Lift: Se activa a velocidades menores de 50 km/h, eleva ligeramente la suspensión para realizar maniobras suaves.

Auto: Funciona convirtiendo al coche en uno con transmisión similar al de un automático.

Autobahn: Funciona en la parte de la suspensión y se activa a velocidades que superan los 120 km/h.

 Handling: Este modo está especialmente pensado en el salto a los circuitos. Le brinda prioridad al drifting, a nivel de máquina tensa todos los sistemas para prepararse a ser exigido al máximo.

 Top Speed: En este modo, es cuando la segunda llave encuentra su sentido. Por lo general el Chirón encuentra como tope de velocidad los 380 km/h.

Sin embargo, si el conductor está consciente de que quiere ir más rápido, debe activar la segunda llave y tras una revisión de la computadora, se encenderá la luz verde para pisar el acelerador a fondo y llevar a este coche a su máximo tope.

En este caso el Chirón logra llegar a los 420 km/h, por supuesto, esta no es una velocidad que se pueda utilizar en cualquier camino, por lo que como un detalle bastante peculiar han integrado la idea de la segunda llave para verificar que el conductor en efecto está razonando en su deseo de romper el viento con tal velocidad.

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