Los movimientos clave en un coche para evitar un accidente

Comenzar a conducir es una de las cosas más emocionantes de nuestra vida, la promesa de libertad, confort y dejar de depender de los demás o del transporte público, lo convierte en un momento especial, pero pocas veces recordamos la responsabilidad que estamos adquiriendo.

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Manejar no es sólo ir de un lugar a otro, es conocer los lineamientos de tránsito, respetarlos y, sobre todo, saber cómo reaccionar en caso de tener una situación de peligro en el camino. Lo recomendable para quien apenas va a aprender es ir a una escuela de manejo, donde conocerá lo básico y comenzará con el pie derecho su andar en las calles de la ciudad.

Si ya tienes más tiempo conduciendo no todo está perdido, también existen programas como la GNP Driving School que se imparte en el Autódromo Hermanos Rodríguez, donde podemos perfeccionar el manejo y corregir malos hábitos que ya tenemos.

Antes que nada, revisa tu posición de manejo:

La posición de manejo es fundamental para tener una conducción segura, pues es la única forma en la que podremos estar preparados para cualquier eventualidad con las manos y las piernas en la posición correcta.

a) Lo primero que debemos ajustar es la altura del asiento, lo recomendable es sentarnos lo más bajo posible sin perder una buena visibilidad hacia adelante, ello nos dará un mejor control y centro de gravedad.  También se puede ajustar poniendo el puño cerrado sobre la cabeza, apoyando el pulgar y el índice, y la distancia no debe ser menor al tamaño del puño.

b) El segundo paso es la distancia con los pedales. Pega la espalda y la cadera contra el respaldo y luego estira la pierna derecha y recorre el asiento hacia adelante. La posición correcta es cuando tu pierna totalmente estirada se apoya en la pared que está detrás de los pedales. “El objetivo es tener una flexión en las rodillas que nos va a servir para pisar el freno lo más fuerte posible y también para proteger la rodilla y la cadera en caso de recibir un impacto.”

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c) Lo siguiente es el volante, una vez que tenemos la distancia con los pedales, mantenemos la espalda bien pegada en el respaldo y estiramos los brazos. Nuestra muñeca debe quedar exactamente sobre la parte superior del volante. Si no es así, ajusta la profundidad de la columna de la dirección o el respaldo, si no se puede mover el volante. En caso de que se pueda mover no sólo en profundidad, sino también hacia arriba o abajo, la altura del volante no debe interferir con los diales del tablero, por lo que lo ideal es alinearlo al borde de la visera del tablero.

d) Una vez que está ajustado el volante, tómalo a las 9 y a las 3. Imaginemos que es un reloj, por lo que las manos van en los lados laterales, eso nos dará la flexión necesaria en los codos para poder hacer maniobras evasivas en caso de encontrar un peligro en el camino y tener el control del vehículo.

e) Cuando sujetes el volante, los pulgares siempre deben ir en el frente del volante y no abrazándolo, por ello muchos volantes actualmente tienen unas protuberancias y es ahí donde deben descansar los pulgares. Esto sirve para tres cosas:

1. Para no colgarnos del volante; tener las manos más sueltas y preparadas para maniobrar;

2. Para evitar rompernos los pulgares en caso de que un accidente o un golpe fuerte en la dirección haga que gire bruscamente

3. Para sentir todo lo que hace el eje delantero ya que las yemas son las partes más sensibles del cuerpo.

f) Finalmente, el cinturón de seguridad. Siempre que nos lo coloquemos debemos asegurarnos que la parte inferior descansa sobre nuestra cadera, y no en el estómago, pues sólo así nos va a sujetar en caso de un accidente. De igual forma la parte superior debe ir entre el hombro y el cuello, para que detenga el tronco en caso de un impacto.

Nunca debemos usarlo debajo de la axila o de cualquier otra forma, porque acabaremos impactando el volante al frenar. Finalmente, debemos darle un jalón en la parte superior para que quede lo más ajustado al cuerpo y cumpla al 100% su función en un percance. 

Ahora que ya sabes cómo acomodarte, el piloto e instructor de la escuela GNP Driving School, Juan Alfonso Rodríguez, nos mostró las cinco maniobras que pueden salvar nuestra vida en una situación de emergencia y que te presentamos en la galería superior.

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