La agresividad de la Fórmula 1 en esta temporada

El Gran Premio de Australia ha traído algunas respuestas a la duda de si las normativas técnicas que se introdujeron para 2017 en los monoplazas funcionarían. La mejora en la velocidad es notable, la dificultad para controlarlos también y un error, como se esperaba, cuesta caro. Los rebases son un tema pendiente.

Max Verstappen, piloto de Red Bull Racing, dijo tras la sesión de clasificación que “en cuanto a las carreras, creo que será más aburrido, porque el domingo quien llegue primero a la curva ganará la carrera”.

Foto: Mercedes AMG

Su voz fue seguida por la del mexicano Sergio Pérez quien adelantó que a consecuencia de la anchura de los monoplazas el tema de los adelantamientos sería difícil, en especial en una pista como Melbourne donde las condiciones limitan los rebases.

Pero todas estas situaciones ya habían sido advertidas por Lewis Hamilton desde antes del inicio de la pretemporada. Algunos pusieron en tela de juicio sus comentarios pero ahora se hacen una realidad. El problema es tal que la Federación Internacional de Automovilismo analiza si en China, segunda carrera de la campaña, será necesario ampliar las zonas para permitir el uso del DRS (alerón móvil) y con esto ayudar a crear rebases.

Foto: Red Bull

Sumado a eso, los pilotos poco arriesgarán en las primeras carreras de la temporada dado que aún no conocen completamente el comportamiento de los monoplazas; tal como le pasó al australiano Daniel Ricciardo que impactó su Red Bull al inicio de la Q3. El aussie estaba en su primer vuelta de la Q3 cuando perdió el control de su coche en la curva 14 derrapando e impactando contra la barrera de seguridad.

“Como resultado de más fuerza aerodinámica y más agarre, cuando lo pierdes es mucho más violento y agresivo el impacto…Todavía hay un poco que aprender…los coches tienen más agarre, lo que los hace pegarse más a la pista, pero cuando van mal muerdes mucho más. Son nuevas bestias”, declaró Ricciardo quien a sentenció con un “me gustan estos coches”.

Foto: Force India

Las dificultades de manejo van más allá de un simple incidente y por ahora la velocidad alcanzada en las curvas es mayor que en años anteriores y, como consecuencia de ello, las fuerzas de gravedad que soportan los pilotos se han incrementado drásticamente. En el caso específico de Albert Park esto pasó hasta 8 fuerzas G, es decir que el piloto soporta sobre él hasta ocho veces su propio peso.

"Los coches son brutales de conducir. No estamos lejos de picos de 8G en algunas curvas, por lo que es bastante divertido", dijo Romain Grosjean, integrante del equipo Haas. "Pero es exigente para el cuerpo. Es duro en algunas partes y en el coche". 

Foto: Red Bull

Lo que no cambió de la temporada anterior fue la superioridad de Mercedes. Lewis Hamilton, tricampeón del mundo, parece encaminado con cierta tranquilidad a ir por su cuarto título, en especial ante un nuevo compañero como Valtteri Bottas que se dejó vencer por el Ferrari de Sebastian Vettel, arruinando los duetos perfectos en la primera fila de las flechas plateadas.