¿Cómo son las pruebas de impacto en la F1?
POR: Luis Ramírez el Vie, 04 de Septiembre de 2015, 11:43 am
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Apasionado del deporte motor y de la fotografía. Reportero de atracción y comentarista de carreras. Los coches son increíbles pero solo cuando están en competencia.
Desde la muerte de Ayrton Senna habían pasado 21 años antes de que una nueva tragedia sacudiera el deporte motor como pasó con el francés Jules Bianchi en el pasado Gran Premio de Japón, donde la herida se volvió a abrir. Pero que el número de decesos se redujera no fue obra de la suerte sino de un trabajo de mayores exigencias de seguridad así como del uso de materiales de alta resistencia, como la fibra de carbono y el zylon, para crear lo que se denomina la cápsula de supervivencia.
Foto: Getty Images
Como su nombre lo indica, el objetivo de esta pieza, que comprende la cabina del piloto así como el depósito de combustible flexible (que se encuentra detrás del piloto pero separado de él), es asegurar la vida del competidor ante un choque a más de 300 km/h y que puede ocasionar hasta 75 fuerzas G. En resumen, soportar un peso de 250 toneladas.
La concepción de esta pieza se extiende desde la parte inferior del chasis, cercano a la suspensión delantera, prolongándose por el cubículo del piloto hasta la cabeza del mismo.
¿Cómo se consigue esta seguridad? Gracias al diseño del coche que se realiza con estructuras de absorción de impactos situados en la parte trasera, como en la caja de cambios y en los flancos del coche donde se cuenta con paneles fabricados en zylon, un material sintético que se utiliza en chalecos antibalas destacando sus propiedades antipenetración.
La resistencia es tal que se considera que un hilo de este material de un milímetro puede soportar hasta 450 kilogramos de peso.
LAS PRUEBAS DE IMPACTO
Al igual que los coches de producción, los monoplazas de la máxima categoría deben pasar por pruebas de impacto antes de poder rodar en un circuito de la máxima categoría. Estos test se realizan en el centro de impacto en Cranfield, en Reino Unido.
Foto: AP
Cabe destacar que los equipos no siempre pasan estas pruebas y, en ocasiones, las escuderías deben regresar a sus fábricas para rediseñar sus cápsulas de supervivencia.
¿Cómo son los crash test? Éstas comprenden pruebas en movimiento, cargas estáticas y de vuelco, exponiendo las partes delanteras, laterales y traseras del chasis, además de la columna de dirección.
Ante todos estos test, la célula de supervivencia debe permanecer intacta del todo para asegurar el bienestar del piloto.
Las pruebas de impacto frontal se realizan a una velocidad de 54 km/h, las laterales a 36 km/h y las traseras a 39.6 km/h. Para algunos, esto podrá no ser representativo dadas las velocidades a las que puede chocar un monoplaza de la máxima categoría, pero permiten conocer si son capaces de evitar que el cuerpo reciba más de 60 fuerzas G dentro de los tres milisegundos del impacto. En caso de que un monoplaza permita más de esta medida deberá ser rediseñado, tal como le ha sucedido a McLaren y Force India en los últimos años.
EN PRÁCTICA
Una vez que un monoplaza ha pasado los test es el momento de llevarlo a la pista. En algunas carreras el riesgo de un impacto aumenta y los accidentes se presentan.
Las imágenes en televisión pueden parecer brutales en un accidente pero se debe aclarar que partes como los pontones, la nariz, los aleros, etcétera, son piezas encargadas de absorber la fuerza del impacto y diseñadas para destruirse, disminuyendo la fuerza que llegue al cockpit y con ello, al piloto, salvando su vida, haciendo de la Fórmula 1 un deporte más seguro, aunque no exento del riesgo en cada competencia.
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