Te sorprenderá el futuro de la industria automotriz

El recuerdo de KITT, el Auto Increíble, con todo y su jingle, apareció en nuestra mente cuando Gary Silberg líder nacional de la industria automotriz de la consultora KPMG inició su discurso con un video donde una mujer utilizaba su auto como si fuera su asistente personal inteligente: medía sus signos vitales, leía sus mensajes y los respondía con claridad, acomodaba sus citas, ponía videollamadas en el parabrisas y todo mientras el vehículo se conducía de forma autónoma.

Se lee casi como de fantasía, sin embargo, es casi una realidad. Marcas como Nissan, Volvo, Toyota, Continental o Google, trabajan a marchas forzadas para poder lanzar a la venta un auto que pueda conducirse sin la intervención de un usuario. De hecho, la firma japonesa ha fijado como objetivo el 2020 para su lanzamiento.

A la par, todas las firmas automotrices están buscando que sus sistemas de infoentretenimiento ofrezcan la mejor conectividad con los teléfonos celulares y tabletas con los dos sistemas operativos más populares: CarPlay, de Apple, y Android Auto, de Google.

Los analistas de KPMG dicen que las empresas que deseen mantenerse vigentes dentro de la industria automotriz deberán de ofrecer estos dos servicios de manera infalible.

Según la publicación Yo, mi auto, mi vida, el futuro de la industria automotriz estará más enfocado a la conectividad del vehículo así como los servicios que ofrezca.

Estos tienen que ser sencillos de utilizar y deben ofrecer las herramientas necesarias para poder llenarle el ojo a los Millenials (jóvenes que nacieron a partir de 1982 y que les tocó toda la revolución tecnológica) cuyas preferencias radican en leer y enviar mensajes, recibir llamadas y mantenerse informados de las últimas noticias entre otras aplicaciones, en lugar de disfrutar de conducir un auto.

El cambio radical de actitudes y prioridades se ejemplifica mejor con el interés por sacar una licencia de conducir.

“Una investigación publicada por el Instituto de Investigación de Transporte de la Universidad de Michigan muestra que (...) en 1983, por ejemplo, en Estados Unidos, 83% de personas con 19 años sacaban su licencia, en 2009 esa cifra bajó a 75%”, citó KPMG en su estudio.

Antes de tener un coche, es mejor traer el celular más actual.

Lo que veremos en el futuro

Este año dejamos atrás la Era de la Tecnología y nos adentramos a la Era de la Ultraconexión, la cual se asocia a un nuevo concepto de sociedad dependiente de las nuevas tecnologías para estar todo momento en contacto; la industria automotriz no está exenta de incluirlas en sus autos.

Para KPMG, uno de los pilares para ser líder en los próximos años es mejorar los modelos de entrada de gama, con nuevas tecnologías que puedan sobrevivir al vertiginoso desarrollo de la misma, la rapidez con la que hay nuevos lanzamientos y la demanda de los consumidores. Sin olvidar que esta tecnología debe ser accesible para este segmento.

Otra de las áreas de oportunidad es convertirse en maestros de los datos. Es decir, que a través de la información que genere el usuario en su vehículo se puedan crear soluciones de movilidad que mejore su vida. Por ejemplo, dentro del sistema de BMW Connected Drive la aplicación de información de tráfico en tiempo real, ofrece alternativas de rutas de acuerdo a las necesidades del usuario.

¿Es parecido a Waze? Sí, pero la ventaja es que éste está directo en el vehículo y transmite la información al head-up display, reduciendo los riesgos de un  accidente por desconcentración.

Uno de los factores más importantes es tener una buena interfaz hombre-máquina, la cual esté siempre disponible y se integre perfectamente con sus dispositivos. Esto sería como una especie de Siri o Google Now, pero eficaz y fácil de usar. Esto es todo un reto ya que, actualmente, los sistemas de comando de voz no son precisos y en ocasiones nos distrae más utilizarlo.

El futuro nos alcanzó y el cambio ha sido tan rápido que ha sido difícil darnos cuenta que en un futuro habrá gente en un auto que no necesariamente sepa o guste de manejar.