Esto es lo que enfrentan los ciclistas y es un misterio para todos

Una de las mayores desventajas de ser ciclista es que muchos de los problemas que enfrentamos no solo pasan desapercibidos, en ocasiones hay vidas de por medio.

Lo que usualmente se ve son las faltas y la irresponsabilidad de quienes deciden trasladarse en bicicleta (que son completamente reprobables), pero valdría la pena ver las cosas de manera distinta.

Aunque parezca obvio y se haya mencionado incontables veces, la ciudad no contempla a otros medios de transporte.

Pongamos un ejemplo: Al arrancar al mismo tiempo que un auto, este alcanzará 30 kilómetros por hora en segundos y apenas unos metros. Esto significa que de inmediato se posicionará frente al ciclista. Si el auto planea dar vuelta a la derecha, compromete a la bicicleta que planea seguir recto. Arrancar unos segundos antes, supone mayor seguridad al escapar de la estampida de autos.

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Por esta razón es por la que pasarse el alto es más seguro en ese sentido.

De acuerdo con el arquitecto danés y especialista en diseño urbano, Henrik Lundorff Kristensen, hacer una ciudad contemplando a todas las personas y sus medios de transporte, es lo más adecuado; siempre pensando en los actores más vulnerables.

Según el especialista, dichas soluciones deben provenir del diseño y no de señales o mobiliario desagradable.

Teniendo eso en cuenta, en el ejemplo de arriba,  podríamos tener dos opciones: implementar un semáforo para ciclistas o bien rediseñar la calle para que ambos convivan sin correr peligro.

La gente literalmente, no te ve.

Es común que al circular, me encuentre con esa persona que aunque yo haga todo correctamente, se cambie de carril o gire justo cuando estoy a un par de centímetros. Aunque me dé mucho coraje y quiera gritarle, primero analizo.

He llegado a la conclusión que en verdad hay gente que no te ve. Ya sea por descuido o porque no está acostumbrada o porque la calle no le ayuda a considerar a todos. A menudo responden con una sincera disculpa. No necesariamente los culpo.

El transporte público

Muchas veces es el enemigo común. Siendo tan importante para muchas personas, es correcto pensar que tienen cierta preferencia. Pero la verdad es que son un elemento peligroso y es difícil perdonarles tantas faltas que cometen. Teniendo un vehículo tan grande, el daño (y el miedo al pasar cerca de uno) puede ser muy mayúsculo.

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Otros ciclistas

El hecho de que algunos sean más irresponsables, no es relevante, o al menos no tanto.

Otro aspecto aún más grave son aquellos que no reconocen a los demás actores.  El movimiento ciclista en México, es importante, sí; pero la superioridad moral con la que muchos de ellos se conducen, poco abona a la integración de todas las personas.

Los estigmas

La fama de los ciclistas no es particularmente buena.  Poco se ha hecho por que eso sea diferente tanto por parte de las instancias gubernamentales, como de los usuarios de la vía (incluidos los ciclistas).

Violencia y acoso en las calles

Quien se siente con mayor poder, trata de ejercerlo sobre los demás. Lo más lamentable de esto, es que involucra agresión que puede denigrar, o cobrar vidas humanas

Al día mueren cerca de 20 ciclistas, de acuerdo con Conapra Foto: Archivo

Muchos dirán, “Pero algunos ciclistas son imprudentes; se suben a las banquetas”. No hay cómo defender a esas personas. Alguien que pone en peligro a los demás solo por un beneficio propio, no debería estar circulando.

Como hemos mencionado antes, lo mejor para todos es entendernos y crear comunidad en las calles.

Foto: Especial

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