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Comprueba por qué Audi S8 tiene la velocidad en la sangre

POR: Cristian Moreno el Vie, 19 de Diciembre de 2014, 07:24 pm

Para cualquier amante de la velocidad un S8 representa la oportunidad de tener a su disposición uno de los bólidos más rápidos y fascinantes del mundo, uno de esos autos que atentan en contra de las leyes de la física, sin despeinarse. Foto: Juan Herrera +23 VER GALERÍA
Cristian Moreno

Cristian Moreno | Colaborador

Amo los autos y me apasiona la movilidad. Coordinador del concepto  Atracción en sus distintas plataformas. Editor del periódico Excélsior y conductor en Excélsior Televisión. Consultor, conferencista y colaborador del programa de radio Autos en Imagen. Ciudadano del mundo, hecho en Cuernavaca. 

Nuestro primer encuentro con el S8 fue casual y fortuito, en el motor lobby de uno de los hoteles más lujosos de París. En cuanto el auto se detuvo la gente se arremolinó alrededor del conductor, un astro del futbol que dueño de la situación se abrió paso entre los celulares que lo fotografiaban; mientras nosotros no le podíamos quitar la mirada de encima al poderoso Audi.

 

No le envidiamos ni la despampanante compañía ni la fama, pero nos hubiera encantado intercambiar con Zlatan Ibrahimovic su auto. Pasaron casi dos años para poder cumplir nuestro deseo, pero la espera valió pena. Junto con otros deportivos de la marca de los cuatro aros entramos a la pista de Amozoc para vivir una experiencia sublime.

 

Ahí, entre otras cosas, pudimos disfrutar de una aceleración privilegiada. La marca promete llevarte de cero a cien kilómetros por hora en tan sólo 4.2 segundos y sólo para sentir en carne propia si esto era cierto, intentamos lograr ese tiempo en repetidas ocasiones.

 

Pero éste no es un auto de cuarto de milla pues, si bien no lo hace nada mal, curvear también puede considerarse como uno de sus atributos.

 

Gran parte del secreto para ofrecer este comportamiento es cortesía del poderoso V8 4.0 litros biturbo, que es capaz de empujar con soltura los 1,975 kilos que pesa, gracias a 479 libras-pie de torque.

En pista, la ligereza del chasis de aluminio se refleja en la agilidad con la que se mueve, y es que de un auto con 5.136 metros de largo no se espera un comportamiento tan dinámico y sin embargo lo tiene.

 

La pista nos quedó corta y nunca pudimos comprobar si la velocidad máxima, gobernada a 250 kilómetros por hora, realmente ponían en aprietos a este bólido, que por encima de los 230 kilómetros por hora ni siquiera se despeina.

 

La solidez estructural proporciona una estabilidad increíble de tal forma que, aún a altas velocidades, nos sentíamos muy cómodos.  La experiencia en pista nos dejó ver un auto bien equilibrado y que a pesar de la deportividad no pierde su espíritu señorial.

 

Sin embargo, queríamos ver cómo lo hacía en la calle, donde los topes, baches y caminos irregulares cambian las cosas por completo. Llevamos el auto a la autopista y fue ahí donde pudimos comprobar otras bondades que dentro del circuito pasaron desapercibidas. El confort y generoso espacio convierten cualquier viaje a bordo de este bólido en una excursión digna de documentarse.

La calidad de los materiales y el cuidado en la ejecución de los ensambles proyectan la personalidad del tipo de clientes que este S8 busca: los muy exigentes. Mientras que el equipo y algunas funciones, poco comunes en un auto deportivo, complementan una agradable experiencia.

 

El forro de los asientos, los materiales del tablero y las aplicaciones metálicas nos dejan saber que un conductor con espíritu joven será quien se sienta más cómodo a bordo de esta propuesta, que incluye acabados en fibra de carbono, en lugar de la madera que se suele encontrar en los autos de lujo de dimensiones similares.

 

Pero nuestro corazón ya latía desenfrenado, así que quisimos ver qué tal se comportaba con la carretera un poquito mojada, sospechando que la lluvia podría incrementar el grado de dificultad.

 

Conforme más acelerábamos, la tracción integral quattro más presumía sus cualidades, cual si fuéramos sobre rieles, y la trayectoria en ningún momento se puso en entredicho, vaya ni siquiera un pequeño derrape.

Bastaba recargar el pie en el acelerador para empezar a encontrar potencia, pues desde las 1,700 revoluciones por minuto el motor comienza a empujar. El sistema antideslizamiento (ASR), control de estabilidad (ESP), bloqueo electrónico del diferencial (EDS) y los frenos antibloqueo (ABS) conspiraron a nuestro favor para que, por momentos, nos sintiéramos pilotos profesionales con 520 caballos de fuerza a nuestra entera disposición.

 

Y si bien sentimos que la dirección de pronto era demasiado cómoda y un tanto sobreasistida, adoramos las paletas de cambio detrás del volante, que nos hacían sentir el poder de los cambios, administrados por una transmisión Tiptronic de ocho velocidades.

 

Las apariencias engañan

 

Podría pensarse que el look es más el de un auto de lujo, sin embargo no es así. A pesar de los gadgets y de la enorme pantalla del sistema de navegación desde la cual también se administra un potente sistema de audio Bose, ésta no fue la parte del infoentretenimiento que más nos sorprendió, toda vez que, a través del Audi Drive Select, es posible regular la puesta a punto del auto y orientarla a un modo más deportivo, en caso de ser necesario en un modo más cómodo.

 

Cabe aclarar que la suspensión neumática, dirección y motor del auto modifican su comportamiento, con la intención de sacarle mayor provecho a cada una de las cualidades de este auto, adecuándolas a las condiciones del camino.

 

La fusión de dos personalidades, la de un ejecutivo y el de un piloto de carreras, conviven de forma increíble a bordo de este auto, que no escatima en equipamiento y mucho menos en deportividad. Definitivamente lo mejor de dos mundos a bordo de un mismo auto.

 

Audi S8 a detalle

 

Motor: V8 4.0 litros biturbo

Potencia hp/rpm: 520/5,800

Tracción: Integral quattro

Velocidad máxima: 250 km/h

0 a 100 km/h: 4.2 segundos

Asientos: Deportivos de piel con masaje y memorias de posiciones.

Volante: Deportivo de piel con controles de infoentretenimiento.

Entretenimiento: Radio AM/FM, CD, DVD, Audi Music Interface, lector de tarjetas SD y Bluetooth.

Bolsas de aire: Frontales para conductor y pasajero y laterales tipo cortina.

Cinturones: De tres puntos.

Frenos: De disco con ABS

Otros sistemas: Antideslizamiento, control de tracción, bloque diferencial electrónico.

 

1,999,600 es el precio de la única versión que se comercializa en nuestro país del S8

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